EXISTE UN NERVIO CRANEAL OLVIDADO

Por Johana Torres Beltrán y Maria Andrea Velasco Mejía

Especialización en Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial

Universidad Autónoma de Manizales

En la literatura se ha considerado la existencia de doce pares craneales que son los encargados de la inervación aferente, eferente, mixta y que tienen la función de distribuirse hacia las diferentes partes del cuerpo con importancia hacia las vísceras de cabeza, cuello y tórax; sin embargo se ha demostrado la existencia de un par craneal adicional, comúnmente conocido como el “Nervio Olvidado”, al cúal se le ha asignado el nombre de Nervio Craneal cero o Nervio terminal. Este artículo tiene el propósito de hacer una pequeña revisión bibliográfica acerca de las características de éste importante nervio que frecuentemente se ha confundido con el Nervio Olfatorio.

El par craneal cero fue descubierto en 1563, sin embargo solo fue publicado en la literatura en el año de 1777 como el Nervio de Wrisberg. El nervio terminal es considerado como un complejo de nervios de un sistema organizado de neuronas difusas, en las regiones laterales de la cavidad y tabique nasal. Se proyecta hacia la parte más rostral del cerebro anterior. En su trayecto el nervio presenta uno o más ganglios pequeños, que contienen neuronas bipolares, unipolares o multipolares, esparcidas o distribuidas a lo largo de él. Los dos tipos neuronales iniciales suponen función sensitiva y el tercero, una función motora encargada de la regulación de la musculatura lisa, relacionada con el control vasomotor en la región septal a la que suple.

Figura 1. A-Vista inferior de un cerebro humano que ilustra el curso del nervio Terminal, medial a los tractos olfatorios, desde la lámina terminal en el diencéfalo. B-Corte sagital que ilustra el curso del nervio Terminal (en azul) desde la lámina homónima, pasando por la lámina cribosa etmoidal y su distribución en el septo nasal. Tomado de: Duque Parra, Jorge Eduardo., Duque Parra, Carlos Alberto. (2006). Nervio terminal: el par craneal cero. Med UNAB, 9 (3), 246-249.

Se ha confirmado una estrecha relación entre el Nervio Trigémino (V par craneal) y el Nervio terminal, pudiendo determinar así algunos trastornos que se presentan a nivel cervical. También se dice que Nervio tiene orígenes distintos: en el Tronco del Encéfalo, la parte superior del VII par Nervio (Facial) y el VIII (Nervio Vestíbulo-coclear). Este Nervio terminal tiene un trayecto paralelo al componente motor del Nervio Facial y posteriormente se une a la cuerda del tímpano. Igualmente estudios demuestran que una porción de sus componentes aferentes, se origina en los receptores del gusto, ubicados en la parte medial y anterior de la lengua; donde se une con la Rama Lingual del Nervio Trigémino. Se entiende entonces que éste Nervio tiene funciones sensoriales y motoras. 

Así mismo y de manera importante se encuentra que el Nervio terminal capta las feromonas detectando si una persona es atractiva a otra o no; en los mamíferos se utiliza para la aprobación del apareamiento. Se han realizado algunos estudios en los cuales se puede concluir que el Nervio cero está relacionado con la actividad reproductiva. Así que el Nervio terminal estimula la secreción de la Hormona Luteinizante (LH), la cual es la encargada de generar las hormonas que controlan el comportamiento sexual. 

Finalmente, investigaciones demuestran que el Nervio terminal, se relaciona íntimamente con el Sistema Límbico en el feto y por ende con la actividad olfativa, estimulando así la LH, importante en los picos de crecimiento esqueletal y craneofacial, la acetilcolina y el Neuropeptido Y que se encuentra en la amígdala cerebral e influye en el comportamiento humano.

REFERENCIAS:

• Bordoni, Bruno., Zanier, Emiliano. (2013). Cranialnerves XIII and XIV: nerves in the shadows. Journal of Multidisciplinary Healthcare. 87-91.
• Duque Parra, Jorge Eduardo., Duque Parra, Carlos Alberto. (2006). Nervio terminal: el par craneal cero. Med UNAB, 9 (3), 246-249.