Aportado por Ana Lucía Giraldo Garcés
Fisioterapeuta en formación
Universidad Autónoma de Manizales
Oreja, mano, brazo, pierna, ojo,
tu mitad que se ajusta con la mía,
en la superficial anatomía
donde corren tu audacia y mi sonrojo.
Para la sed, en tu belleza mojo
los ojos insolados de alegría
y convencida de mi paganía
el árbol del asombro te deshojo.
Apariencia no más, por dentro explora
tu oscuridad, tu sal, tu vericueto,
virus, microbio, célula y espora.
Sangre y poder total es tu sujeto
la fealdad adentro te decora
y te tiembla de muerte el esqueleto.
(Griselda Álvarez Ponce de León)
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